El Imparcial, Madrid | Enero a marzo 2024.

“Una verdad se inventa con suma precisión, y la labor inmensa de la imaginación” canta Juana Molina. Desde pequeña vengo acumulando en mi mente anécdotas de una familia donde la raíz trasciende el suelo que se habita. Historias y tradiciones mezcladas en un folclore ecléctico “españitaloargento”.A medida que pasa el tiempo, crece un glitch entre la certeza y la verdad. “A mayor certeza, menor contenido de verdad” dice el filósofo Bernhard Waldenfels. Pero si hay certezas, no hay dudas, ni tampoco pruebas. A cualquier anécdota siempre le faltan partes, o tiene ese condimento añadido por la licencia creativa que se toma el que la cuenta una y otra vez. Me crié escuchando siempre las mismas historias y me acostumbré a completar con mi mente lo que faltaba en una especie de charla conmigo misma. Un compendio de símbolos, anécdotas, personajes y recuerdos.

“Certezas” es un proyecto expositivo que busca sacar a la luz ese imaginario alimentado por una familia expresando su choque cultural: aquello que pasa cuando hay vínculos yendo, viniendo, quedándose, subiendo y bajando. El recorrido de la exposición a través de una escalera invita al espectador a interactuar con las piezas de una manera inusual: descubriendo diferentes puntos de vista de las obras e incitando a detenerse y contemplar, mientras se gestiona la incomodidad de esa falta de estabilidad entre escalones. Estos beneficios y artilugios de andar al lado del camino es justo aquello que pasa cuando lo que se muda es la raíz. La ventaja de no pertenecer.

Entre piezas de grabado, pintura, serigrafía y cerámica pretende ordenar ese caos mental en dibujos simples pero de lectura compleja, metiéndose ahora en otras mentes que puedan imaginar estas historias y crear nuevas.